Si para el ateo es extremadamente simple cuestionar la existencia de dios, entonces ¿por qué para el creyente le es imposible? La respuesta a esta pregunta está en el cerebro y se puede leer en los libros de William James (Principios de Psicología), Gerald Edelman (El Universo de la Conciencia; Cómo la materia gris se convierte en imaginación) y Francis Crick (La Asombrosa Hipótesis; La investigación científica del alma), estos dos últimos premios Nóbel de medicina.
La mayoría de los neurofisiólogos y psicólogos consideran que el cerebro humano tiene entre otras, dos características fundamentales: La integridad o unidad del cerebro y la diversidad o diferenciación del cerebro.
La diversidad o diferenciación del cerebro implica que en la percepción de cada objeto por una persona, ésta tendrá miles de millones de posibles interpretaciones y dicha persona seleccionará en una fracción de segundo, solo aquella que sea congruente con su unidad o integridad y de esta manera tenderá a ser consistente con ella.
Estas dos características propias del cerebro humano hacen que tienda invariable e inevitablemente hacia la unidad en la diversidad.
Por esa razón ningún creyente podrá dejar de creer en dios, no importa que tan razonables o lógicos sean los argumentos esgrimidos, porque la unidad del cerebro del creyente implica necesariamente la existencia de Dios y todos los argumentos, explicaciones, teorías e interpretaciones que no sean congruentes con la unidad del cerebro del creyente, serán automáticamente descartadas.
Por esa razón en los debates con los ateos, a los creyentes no le hacen mella alguna a su unidad cerebral de creyente, ya que en la vida diaria, éste encuentra innumerable cantidad de interpretaciones de “hechos” que son congruentes y consistentes con su unidad, de ahí que los argumentos de los ateos son descartados sin haber sido prácticamente analizados. Y si algún creyente despabilado se atreve a analizar los argumentos, tendrá a al alcance de su mano millones de opciones a las que recurrirá para mantener la integridad de su cerebro.
Por lo anterior, a la pregunta ¿Se puede dejar de creer en dios? La respuesta contundente es un NO. Un creyente no puede dejar de creer en Dios, la unidad y diferenciación de su cerebro no se lo permite.
A la pregunta complementaria ¿Puede un ateo llegar a creer en dios? La respuesta también es un contundente NO. Un ateo no puede llegar a creer en dios porque la unidad y diferenciación de su cerebro no se lo permite.
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10 comments:
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Saludos
Un creyento puede dejar de creer en el dios de su religion?SI,yo fui creyente gran parte de mi vida y con los conocimientos de personas y por mi cuenta,descubri poco a poco que el dios de mi religion era falso.Ami me gustaria saber como fue su caso,como se llego usted a la conclucion de que su dios era falso.
saludos
un creyente si puede dejar de creer
yo fui creyente, porque asi me criaron en mi hogar (católico), iba a misa todos los domingos y rezaba antese de acostarme a dormir, pero a la edad de los 11 años, creo que por que madure intelectualmente, simplemente decidí no creer, y así lo he hecho
pregono mi no creencia,y la gente se ha tenido que adaptar a eso, nunca he sido un antisocial por ser ateo, me siento muy contento de ser lo que soy... alguien inteligente
saludos
Despues de haber leido las ideas que plantea Libre y Soberano, empiezo a entender la diferencia entre el ateo y el creyente. En el comentario previo de el Señor Rodriguez, el se dice haber podido cambiar de creyente a ateo. En realidad el siempre fue o tuvo en si la capacidad para ser ateo pero por la presion de su ambiente, se catalogaba como creyente. Ahora seria tambien interesante estudiar que es lo que pasaria si el Señor Rodriguez llegara a una "crisis de vida" si revertiria a su creyencias catolicas para sobrellevarla o se mantendira firme en su estancia.
saludos,
Jorge C.
Jcoria76.
Estudios longitudinales de esos casos serían de mucha ayuda para confirmar la solidez del creyente que "supuestamente" se convierte en ateo.
Saludos cordiales.
Jajajajaja y más ja. Es imposible que alguien cambie sus creencias por una "unidad cerebral" La evidencia contradice tus argumentos, no tengo que decir más.
También yo creo! ajaja, empiezo bien, prosigo: pienso que no tiene que ver esa unidad cerebral, todos tenemos amistades, familiares que habiendo sido creyentes durante años de pronto acaban por abrir los ojos, por reconocer que la iglesia es una gran superficie y el dios ese la moto que venden.
De hecho todos nosotros prácticamente de niños, los bautizados la menos, crecimos con esa creencia o no?.
Interesante blog no obstante eh, gracias a cyberateos he llegado aquí y creo que me va a gustar
Pekas, de pecosilla.
Uissss, la palabrita de verificació me echa para atrás, porqué no la quitáis?. Creo es por... Personalizar, configuración. Es una lata, muchas veces no aciertas y vuelta a empezar a intentar descifrarla jo.
Venga, un saludo
Hablas como si la gente no cambiase luego el post carece de sentido de principio a fin. Ahora se sabe que el cerebro es muy maleable y que las neuronas son muy susceptibles de cambiar sus conexiones para formar estructuras distintas a las anteriores resultando pues, una nueva forma de ver el mundo también en la etapa adulta.
Cualquier ateo se puede convertir en creyente y cualquier creyente en ateo.
Y nada, aquí te dejo con tu ateísmo de élite solo reservado para unos pocos elegidos en el planeta que a los pocos minutos de nacer ya sabían que eran ateos.
A mí personalmente no me afecta nada de todo esto pues se que la ciencia terminará por dar respuesta a todo, ésta sin embargo, aún se encuentra dando sus primeros pasos. Los humanos como civilización apenas estamos en los primeros 2 minutos de vida si el total de vida para una civilización lo dividimos en 24h. es decir, nos sobra soberbia y creemos todo descubierto cuando hay que cuestionar hasta a propia ciencia. Ese es tu problema, que no cuestionas nada, si nunca cuestionasemos nada no avanzaríamos. Y por supuesto, repito, la ciencia es la primera que debe ser cuestionada a diario para no levantar una torre con base defectuosa, la religión no debe ser cuestionada pues ella misma se hunde bajo su propio peso dogmático.
Cuestiona más y da menos juicios y clasificaciones, serás más útil para todos, sin acritud, sólo es un consejo.
En realidad yo no creo que el autor sea ateo... me da la impresión de que en realidad es un "padre" católico o algo similar. También me da la impresión de que está acpstumbrado a tratar con jóvenes. Los comentarios positivos hacia el ateísmo de este blog solo parecen adulaciones dirigidas, precisamente, para una cierta "élite" de ateos... tal vez con el fin de mantenerlos "contentos" y por tanto al margen de lo que creo es la verdadera intención de este blog: "Desencantar" de la idea del ateísmo a aquellos que no se sientan parte de dicha élite, probablemente esos que son precisamente los más jóvenes de nosotros. A ellos yo les digo: Si no crees, no creas. No nececitas encontrar una razón para dejar de creer, eres libre de hacerlo cuando gustes. No nececitas justificar tu ateísmo ante nadie.
Pues el autor también parece tener es unicidad que hace que se crea que es un ser con otro tipo de cerebro al de los humanos mortales. Si nació ateo con un sistema nervioso que le impide ser de otra forma y tener elección, como un perro que no puede entender ni tan solo preguntarse por que nos limpiamos el culo con papel de doble hoja, triple hoja, o con la revista del día. En realidad no creo que el autor sea mejor que alguien que adoptó el ateismo en base al razonamiento y la autocritica pese a tener una mente que tiende a tener fé por genética. Siento làstima por el autor por que no es capaz de razonar, entender y mucho menos experimentar la complejidad de nuestra naturaleza y solo sigue los derroteros de su minusvalida mente.
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